El ciclo lunar y su influjo sobre los seres |
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https://www.youtube.com/watch?v=PJuZvmbr-68&list=PLNlC5AB6RoElhbYipAgwKXp9qgXyggFQu
Mucho se ha dicho de Luna
y su influjo sobre los seres que habitamos en este planeta. Algo de eso hay,
por el efecto que ejerce sobre las mareas y el contrapeso que hace a la fuerza
gravitacional y que afecta el comportamiento de nuestro cuerpo, no así de
nuestras vidas; esa depende de nosotros, de nuestros pensamientos, palabras y
acciones.
Sabemos que Luna pasa por cuatro
estadios principales: Nueva, Cuarto
creciente, Llena y Cuarto menguante,
las cuales se identifican por la cantidad de luz que muestra la reina de la
noche. Cada una de las fases marca el
fin de un ciclo y el inicio de otro.Es por eso que podemos relacionar lo
descrito de Luna nueva a Luna llena, con la etapa de
desarrollo y puesta en funcionamiento de cualquier evento y de Luna llena a Luna nueva con la de resultados y consolidación.
Aproximadamente dieciocho horas antes y dieciocho horas después de Luna nueva, salvo contadas
excepciones, lo óptimo es reposar ya que el novilunio corresponde con el
instante crucial entre la muerte y la vida; cuando un periodo llega a su fin
para dar inicio a otro que se ha venido preparando; Sol opaca a Luna.
Pasado ese tiempo entramos en la
primera mitad de la fase creciente,
propicia para hacer crecer lo que habíamos estado pensando hacer. Dos días en
los que se activa la chispa iniciadora, lo que se venía preparando está listo
para despuntar, las plantitas que estaban saliendo de la semilla asoman sus
hojitas, las flores abren el capullo y aparecen hermosas desplegando su
fragancia. Se abre el telón y empieza la obra. Luego se da curso a lo
iniciado, lo sugerido es hacer caso a lo que tiene que ver con lo que nutre, ya
sean ideas o bienes materiales, en esta etapa, perseverancia es la clave. Los
días finales de la fase son para llegar a acuerdos, arreglar documentos,
comunicarse, tratar con los relacionados ya sean consanguíneos o vecinos,
trasladarse o viajar. Yo soy, Yo
tengo, Yo digo son las afirmaciones claves.
Al llegar a la fase del Cuarto creciente estaremos en el
punto medio ascendente que nos indica que es el momento de terminar de hacer todo lo que debamos hacer
para llevar nuestra acción al clímax que representa Luna llena. Este punto medio de la trayectoria
diciéndonos que en los primeros días toma importancia lo que hagamos en grupo,
los cambios, las fluctuaciones, lo que nutre y lo que sentimos, días en los que
puede prevalecer la emoción sobre la razón; mas o menos en la mitad, nuestros
proyectos debieran estar como una fogata en plena combustión, chispeante y
viva; cobra importancia el “Yo puedo”
y los asuntos relacionados con inversiones, afectos, hijos, el placer y lo que
tiene que ver con enseñar y aprender. Ya para el final la tendencia será hacia
el logro de lo material, habrá que poner atención a las ocupaciones cotidianas,
al trabajo, a la posibilidad de hacerlo en equipo, a la salud y al
requerimiento de ayudar a los demás con nuestras acciones. Serán días para dar
los toques finales, para que en la próxima fase podamos prepararnos para la
cosecha. Un periodo Yo siento, Yo puedo, Yo hago. Para ser como cangrejos que
se transforman en leones y terminan actuando como hormigas.
En Luna Llena es tiempo de preparar la cosecha, disponer la situación para
recibir los resultados, corregir, equilibrar, relacionarse con los demás,
buscar la armonía, solucionar conflictos, balancear las cargas, para luego
estudiar que hay que transformar, hacer un análisis profundo de la situación de
forma tal de determinar que hay que llevar hasta el fondo, que hay que terminar
y que debe continuar. Días de revisar las reservas, estudiar si hay que pedir
prestado y fortalecer lo realizado hasta ahora teniendo cuidado de actuar con
la razón controlando las emociones. Ya lo hecho se parece a una hoguera que
está lista para dar calor, no tiene fuego vivo, solo rescoldos. Brillante y
silenciosa cumple su misión, es libre y esta en pleno funcionamiento. Son
etapas para conjugar, para tener todo listo para la última etapa.
Con el Cuarto
menguante empieza el final. Podremos cosechar según hemos sembrado. Yo logro, Yo
comparto, Yo termino. Hemos
llegado a la cima, los resultados del periodo deben ser evidentes, es hora de
meditar sobre lo logrado, recoger los honores y barrer los fracasos
levantándonos con la cabeza erguida. En esta fase podremos evaluar la
conveniencia de pedir favores, lo que tiene que ver con imagen, compartir con
los amigos la alegría del logro o el gusto amargo de lo no alcanzado. Si algo
imprevisto tuviere que pasar es posible que ocurra con mayor probabilidad
ahora, pero en el opuesto la creatividad nace dentro de nosotros, hay que
volver a empezar, el ciclo está llegando a su fin, descansemos el cuerpo
mientras la mente se prepara para iniciar el nuevo ciclo con nuevas ideas y
proyectos., lo compartimos en fraternidad ya que nos recuerda que somos
creativos por lo que, llegado el final que anuncia, sabemos que en el Universo
algo se está preparando, si lo agarramos es nuestro, estará listo para la
próxima Luna nueva.
Como última recomendación te invito a
tener a la mano el calendario lunar y a comenzar, te deseo mucha suerte.
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